En el mes de Julio comenzará la campaña del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) –impuesto que graba directamente el valor de los bienes inmuebles del que seamos titulares.

La pasada campaña del 2014 ya tuvo importantes cambios. El primero es la revisión del valor catastral que se realizó y notificó en Julio del año pasado a través del catastro -la última revisión catastral databa de 1998, lo que daba lugar a desequilibrios entre vecinos de las mismas zonas, lo que significó la subida general de todos los valores de las viviendas del municipio y por ende, el IBI que todos pagamos.

Recordemos también que en base al RD-ley 20/2011, en el año 2012 se incrementó un 10% nuestro tipo de gravamen del IBI, y que se prorrogó para los ejercicios de 2014 y 2015, para la "corrección", según dice el texto, del déficit público.

El segundo cambio del año pasado fue la bonificación del 8% ofrecida por el Ayuntamiento (en lugar del 6,36% anterior) a condición de que el titular del inmueble esté empadronado en el municipio, pero que sin embargo, para este año, ya no se contará con la bonificación de diputación, que no está recogida en los presupuestos de ésta, según nos comenta Encarnación Anaya, del PSOE.

Hay que tener en cuenta otra variable importante y es la subida que aprobó el pleno del ayuntamiento a través de la mayoría absoluta que ostentaba (y ostenta en el ayuntamiento) de una subida del 10% anual del IBI a todos los vecinos del municipio hasta el 2023, como garantía a los bancos a fin de poder devolver los préstamos bancarios solicitados por el equipo de gobierno. "Es una penalización especialmente a las urbanizaciones que son los que más van a notar estas subidas  de aquí al 2023. Imagínense una familia de una urbanización que esté pagando 500 Euros si se les sube un 10% cada año. 550, 605, 665, ... y así hasta 2023. Y que luego son los que menos servicios reciben", nos dice José María Muñoz del PA.

Ante la situación que atraviesa el municipio y que la economía no termina de arrancar, la presión fiscal es algo que preocupa, si no a todos, sí a la mayoría de los ciudadanos, y por esto, los distintos partidos proponen las siguientes medidas:

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PP

Preguntado el Partido Popular, Antonio Rando nos comenta que su intención es bajar el tipo impositivo un 5% como mínimo, que no el IBI (en relación a lo que dice el programa literalmente), de un 0,96195% en urbana y 0,9328% en rústica, y dejarlos al menos en 0,91385% en urbana y 0,88616% en rústica.

Por otra parte, su programa de impuestos plantea continuar con el plan de bonificaciones, especialmente para los empadronados, ya que esto supone más transferencia de impuestos desde la administración central.

Sobre otro tipo de tasas, Rando nos comenta que su idea es que queden congeladas, dado que tienen menos impacto en los presupuestos en comparación con el IBI, con lo que la intención es continuar dando facilidades de pago como el fraccionamiento.

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PSOE

Preguntada Encarnación Anaya por concretar su programa fiscal, nos comenta que quieren bajar el tío impositivo al nivel que estaba antes de la subida, es decir, del 0,96% actual al 0,87%.

Además, los socialistas mantendrán las bonificaciones por empadronamiento y realizarán una revisión y una reforma fiscal completa para tratar de amortiguar el impacto de esta presión fiscal, con especial atención a las empresas. La candidata ha querido recordar que la bonificación para el IBI de diputación no está en los presupuestos de ésta, con lo que no se podrá contar con dicha bonificación.

Según nos comenta Anaya, su intención es unificar los criterios de tasas de basuras, por ejemplo, entre las zonas urbanas y los diseminados, porque se dan situaciones inverosímiles, y revisar estas tasas también en los locales que por la estacionalidad de su sector se encuentren cerrados. 

En cuanto a tasas deportivas, su criterio será retirar esas tasas a mayores y personas con discapacidad, tal como estaba antes.

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IU

Izquierda Unida defiende la progresividad y el reparto justo de la presión fiscal, bonificando las situaciones de desempleo y pensionistas.

Planea una bajada del tipo impositivo, del 0,96% al 0,87%, justo el 10% que subió el Partido Popular, nos dice Fernández Ibar, a la vez que continuará con las bonificaciones a empadronados. Por contra, propone un recargo del 50% de la cuota líquida del Impuesto de Bienes Inmuebles a las viviendas que estén desocupadas con carácter permanente, que son generalmente las pertenecientes a los bancos e inmobiliarias, de forma que se puedan compensar las bonificaciones  a los más desfavorecidos.

En cuanto a las otras tasas, el candidato quiere recordar que el PP hizo un plan de ajuste hasta el 2023 con incrementos de impuestos, que hay que reconducir. Por esto, nos dice, en función de la economía se adecuarán las tasas municipales, de forma que se favorezca el deporte y se eviten cortes de agua para los que pasan problemas con los pagos.

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PA

Por su parte el Partido Andalucista, insiste en que la subida que ha aprobado el Partido Popular en solitario, de un 10% hasta el 2023 como garantía de pago a los bancos por los préstamos solicitados, y que perjudica especialmente a los propietarios de casas en las urbanizaciones, y por el plan de ajuste que aprobó Salado en 2012 con los votos en contra de toda la oposición.

Sin embargo, sí defiende la bajada del tipo impositivo del 0,96% al 0,87%, sobre el que sí tiene competencia el ayuntamiento, pero siempre y cuando las cuentas del ayuntamiento se conozcan.

Plantean mantener e incentivar el empadronamiento porque supone la entrada de más impuestos al Ayuntamiento de la transferencia que hace el Estado.

Con relación al resto de tasas municipales, Gómez, nos dice que una vez que se dé transparencia a las cuentas se verá que se puede regularizar, congelar o bajar.

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UPyD

La propuesta de UPyD contempla una bonificación en el IBI del 20% para empadronados y subidas proporcionadas para las segundas y terceras viviendas que estén totalmente desocupadas que generalmente están en manos de los bancos, nos dice Guillermina Paniagua.

En temas de tasas, proponen una revisión de las ordenanzas municipales. La candidata sí hace un especial hincapié en las bonificaciones para turismos no contaminantes matriculados en el municipio y la adecuación de las tasas a la realidad de las familias.

Propone además hacer unos presupuestos realistas, y que los fondos que lleguen al ayuntamiento por parte del Estado sean acordes a los servicios que se prestan, con el fin de compensar cualquier bajada de impuestos que se proponga.

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C's

Antonio Pérez de Ciudadanos quiso resaltar que ellos mantendrán el IBI tal y como está, precisamente por la situación económica por la que pasa el Ayuntamiento, pero también mantendrán las bonificaciones y ayudas por empadronamiento.

Sólo si hay una revisión catastral y se ve que ha bajado el precio del suelo, entonces aplicarían la bajada del IBI.

Su política, comenta Pérez, va encaminada al ahorro de gastos en todo lo que se pueda sin mermar los servicios.

Respecto a las tasas municipales, Ciudadanos mantendrían congelado el impuesto de circulación. Y para las PyMEs, proponen mantener los aplazamientos sin intereses de las licencias para facilitar el empleo y la economía.

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Ahora Rincón

En su programa, la candidatura de Ahora Rincón propone la rebaja del IBI para lo que llaman "atemperar su desproporcionado incremento". Proponen, por tanto, "conformar un esquema tributario claro y preciso, sin discriminaciones ni ayudas discrecionales para reducir el tipo de gravamen y trabajar por la igualdad contributiva".

Lo que no sabemos es si esto significa una bajada del IBI, una congelación, una bajada de tasas municipales, o todo lo contrario, ni a qué tasas se refieren.

Ampliación posterior sobre Ahora Rincón aquí.