Rincón de la Victoria, a oscuras sobre el coronavirus
Cuando ya parecía que el concejal de Seguridad, Borja Ortiz, y la concejala de Sanidad, Mari Carmen Cañizares, iban a comparecer a petición de la oposición para informar a la ciudadanía sobre las circunstancias que habían rodeado el cierre de dos locales de comida rápida del municipio a consecuencia del coronavirus, todo ha quedado en agua de borrajas y sólo se ha votado en el pleno la aprobación de dicha comparecencia.
Vaya tomadura de pelo a los vecinos del municipio. Nadie contaba con el reglamento del pleno. ¡Qué ilusos!
El propio alcalde del Ayuntamiento, sorprendido por su propio reglamento, comentó antes de la votación que para cuando se quiera dar explicaciones, la información carecerá de actualidad; y así será porque hasta el próximo pleno, si es que en agosto hay plenos, no se producirá esa comparecencia. Todo un dislate.
Con lo fácil que hubiera sido que el responsable de Seguridad, Borja Ortiz, el que ha sido el responsable del mando único en ausencias del alcalde, hubiera dado un paso adelante e informado a la ciudadanía, convocando a los medios de comunicación y de manera voluntaria.
Eso sería hacer las cosas bien. Lo contrario es parapetarse en el despacho y no afrontar su responsabilidad frente a sus vecinos, que le piden estar informados. Una más de lo que han sido todos estos meses de pandemia cuando en el municipio ha habido al menos 168 casos confirmados (un positivo más en los últimos siete días) y 7 fallecidos.
En cualquier caso, prueba superada. Ya no es de actualidad.