CÍRCULO CULTURAL BEZMILIANA
Edición de octubre del III Concurso de microrrelatos del Círculo Cultural Bezmiliana
Todavía estas a tiempo para participar en el concurso del mes de octubre y escribir tu microrrelato, para ello te damos la frase y palabras obligatorias en tu redacción.
Conoce, además, los ganadores del mes de septiembre.
Esta es la frase y las tres palabras para participar en la edición de octubre del III Concurso Microrrelatos:
Frase: Una mirada cautivadora desnudó mis sentimientos
Palabras: envalentonado, invitación, desasosiego
Hay que recordar efusivamente que:
- Son obligatorias tanto la frase como las tres palabras y que deben de ir en negrita en el microrrelato
- El microrrelato no debe superar las 150 palabras.
- Como novedad en la edición de este año el tema es libre aunque se toma en cuenta que esté relacionado de algún modo con Rincón de la Victoria o su término municipal.
Envía tu microrrelato junto con tu nombre, dirección postal, correo electrónico y teléfono de contacto al correo electrónico:
[email protected].
Tienes tiempo hasta el 31 de Octubre.
Microrrelato GANADOR de septiembre
MI TÍO JUAN Autor: Santiago Messa Poullet
¿Qué hacen estos marengos?
· Sacar el copo de madrugada, decía sin dudar
¿Y estos árboles que son?
· Higueras del atajadizo de Huerta Julián, contestaba rotundo
¿Y este castillo que abarca toda esta plaza?
· Bezmiliana, indicaba categórico.
¿Y esta cueva misteriosa?
· La del Tesoro, dijo como un resorte.
Mi tío Juan ya no nos reconocía. Era víctima de la cruel enfermedad del olvido, que deja temblando el conocimiento y desnudo el corazón, pero mantenía vivo el amor a su pueblo. Nunca se equivocaba al recordar iconos y lugares de su Rincón de la Victoria. Ese era sin duda, el instante preferido del día. Se le iluminaba la cara mientras recordaba sus infinitos espacios.
Cada tarde... cada día.
La sorpresa se le reservaba siempre para la última imagen:
Y ¿quién asoma por este mirador?
· ¡La más guapa! Esa es mi madre, la Virgen del Carmen.
Microrrelato FINALISTA
SIN TITULO Autor: Lourdes Alonso Carrión
Veraneamos por primera vez en Torre de Benagalbón en 1973, ese fue el último verano de mi abuelo Paco. Nos encantaba ir con él a ver sacar el copo de madrugada.
Abundaban las plantaciones de hortalizas y frutas que comprábamos directamente a José, el campesino. Recuerdo como hundía su abarca en la tierra al recoger las patatas. Jugábamos. Nos escondíamos en una hilera de cañas que servía de atajadizo entre el camino de la playa y el campo.
A modo de mojones de carretera, las araucarias de las casas de la zona servían para situarse a lo largo del mapa costero. La araucaria de nuestra vecina era como otro de sus hijos al que veía crecer. Una navidad, un vándalo cortó su copa y dejó su tronco desnudo. Hoy día la suya es una de las más altas de la zona.
