El proyecto social viene de la mano de la sociedad cooperativa Tartessos Málaga SCA y se trata de la edificación de un espacio residencial y asistencial alternativo para personas mayores basado en la modalidad del cohousing, que se define como la forma de vivir apoyados y socialmente activos en comunidades intencionales autogestionadas. La iniciativa, que ha sido apoyada jurídicamente por el Ayuntamiento, será declarada de interés municipal en el próximo Pleno ordinario.

El presidente de Tartessos Málaga, José Antonio López, nos ha indicado que es un proyecto social y sin ánimo de lucro, cuya inversión privada a través de las aportaciones de los cooperativistas, costea su construcción que está estimada en más de 6 millones de euros. El edificio ocupará los terrenos sociales de un antiguo convento en El Cantal que lleva más de una década abandonado y que ha comprado la Cooperativa. Estiman, además, que el complejo social generará, al memos, 20 puestos de trabajo directos y un consumo anual de 1,5 millones de euros en el municipio. 

Las característica principales del proyecto están basadas en la construcción de un residencial con zonas comunes y privadas para 68 socios en régimen de cooperativa con todos los servicios que se puedan necesitar incluidos los esenciales como la atención a la dependencia. Las zonas comunes más representativas son: comedor-cafetería, consultas médicas y de enfermería, zona de rehabilitación, zona de dependencia, salas de usos múltiples para actividades diversas, piscina, zona de huerto y actividades al aire libre. Cada unidad habitacional dispondrá de 48 metros cuadrados más 15 metros cuadrados, aproximadamente. 

Cada cooperativista tendrá su unidad habitacional en una modalidad de "derecho de uso" a perpetuidad, que es diferente al concepto tradicional de "en propiedad", que no será el caso, ya que no existirá una compra-venta de viviendas, ya que los "vecinos" del complejo son a la vez socios y usuarios de la Cooperativa, y su participación, su "capital social" es la inversión en la participación en el proyecto residencial, que es transmisible a los herederos. 

El presidente de Tartessos Málaga ha subrayado las bondades de un proyecto que es un plan de vida a largo plazo, "que aporta sentido y enriquecimiento a un tercio de la vida, como mejor antídoto contra la soledad y la salud mental". "Nosotros queremos decidir nuestro futuro, no depender de la ayuda de familiares ni de la Administración”, ha añadido López. La iniciativa está dirigida a personas de entre 50 y 70 años, y la sostenibilidad económica del proyecto y los servicios "están fijados en un importe no superior a la pensión media del país situada en 1.200 euros mensuales".

Actualmente, las plazas ya están prácticamente cubiertas con cooperativistas de toda la geografía nacional, aunque la Cooperativa pondrá, durante los meses de abril y mayo, 15 plazas a disposición de vecinos empadronados en el municipio.